sábado, 16 de noviembre de 2013

Los morosos en los colegios generalmente están al día en el CLUB.


La educación es la base fundamental de una sociedad y es un proceso que no debe terminar nunca. Para mucho esto suena como frase de cajón, para otros un pilar básico y esencial de la sociedad para el desarrollo personal, profesional y moral. Es por esto que los principales dineros que salen de un hogar deben estar destinados para las necesidades más importantes: "la alimentación" y  una buena "educación", más no para lujos vanos. Lo cual garantiza el desarrollo armónico de un ser humano. 

Vivimos en una sociedad plástica donde la mayoría de las personas usan disfraces a lo largo de sus vidas, tratando de ganar la aprobación o el cariño de otros que consideran que lo más importante es "el tener" y no "el ser". Sorprende la cantidad de personas esclavizadas por vivir artificiosamente. Conmueve también ver gente endeudada hasta las cejas por diferentes créditos con tal de demostrar que tienen lo que la gente espera. Personas que se embarcan en gastos excesivos con tal de demostrar bienestar, estabilidad y posición cuando lo que tendrían que operar es su cerebro. 

La asfixia de los colegios privados no solo proviene de la crisis económica por el incumplimiento de los pagos de las obligatorias mensualidades, sino también, se origina en defectos constitucionales en los que se amparan algunos padres, que acuden a las tutelas para obligar a los planteles a cumplir con la educación sin cancelar las pensiones de sus hijos . Cuando estos deberían establecer sus capacidades económicas y en caso necesario acudir a los colegios públicos. Cada colegio es autónomo y lo ideal seria no recibir a alumnos cuyos padres no lograron ponerse al día. .

Debido a la  irresponsabilidad de los padres de familia que no ven la educación como una importante inversión, si no como un gasto mas o innecesario y prefieren estar al día con cuenta del Club, sugiero a los colegios privados asegurar los pagos puntuales exigiendo fiadores,  extractos bancarios, recibos de agua y luz para mirar la estabilidad económica de los padres y si es el caso consultar sus estados en las entidades de riesgo crediticio para conocer cuales son sus verdaderos  hábitos. 

Soy partidaria de causar buena impresión en cuanto a bienes y forma de vivir pero no a cualquier precio. Todos queremos que los niños sean bien educados. La mejor herencia que se le puede dejar a un hijos no es el dinero -que igual que viene se va- sino una buena educación. Con una buena educación podrán ir a cualquier sitio y podrán tratar con cualquier tipo de personas.  Inviertan en la educación de sus hijos y dejen los gastos innecesarios a un lado. 


María Lucia Lacouture 
Presentadora de Noticias Camara de Representantes 
@MLLacouture